amor propio

¡Ya estoy satisfecho!

Pinterest LinkedIn Tumblr

¿Alguna vez te has puesto a observar qué pasa en un centro comercial? 

Andaba de compras en estos días y tuve momentos para reflexionar, observando qué sucede ahí. 

Podría decirse que soy la más compradora de mi familia y disfruto estar en un centro comercial durante horas y más cuando traigo dinero. 

Pero esta vez me puse a pensar… ¿Qué nos pasa como sociedad al estar ahí? ¿En dónde se pierde o se gana el sentido de una compra? ¿Tú cuando compras te sientes satisfecho o te quedas con ganas de más? 

Cuando te sientas a observar puedes ver tantas historias pasando ahí: mujeres solas, familias, niños con sus padres, niños llorando, pero todos corriendo a comprar algo; mucho ruido, gente queriendo vender, apatía en las vendedoras, mucha energía yendo y viniendo, etc.. Pero a pesar de la cercanía, se siente lejanía entre todas las personas que están ahí. 

Pocas personas o casi ninguna va despacio disfrutando el momento, tanto los que van comprando, como los que solo ven, hay mucho movimiento sin interacción. No existe una mirada de persona a persona, ni la intención de que la persona que compra de verdad se lleve algo de valor a su vida, que haya una conexión.

 Para algunas personas, el comprar es algo necesario, para otros es estatus, para otros es estar a la moda, etc. ¿A ti qué te da el comprar? ¿Qué buscas sentir cuando estás ahí?…Y cada vez que vas, ¿logras obtenerlo? 

La vida no es acumular, sino merecer, hemos creído que entre más tengamos, más somos y no es así. Podremos tenerlo todo, pero si no sentimos que lo merecemos y que tenemos la capacidad de disfrutarlo, nunca va a ser nuestro. 

Por lo general buscamos el tener, pero no sabemos para qué lo queremos, compramos y acumulamos, pero la sensación de placer es muy corta y vuelve a entrar la cosquillita de comprar. 

Si acumulas y no crees que te lo mereces, la ganancia es momentánea, pero si sientes que te mereces lo que sí hay en tu vida, trabajas en disfrutarlo, no importa lo que tengas, siempre habrás ganado para ti. 

Hoy te invito a que reflexiones sobre esto y que cada vez que adquieras algo, cumplas tu objetivo de darte lo que es para ti, merecértelo y, sobre todo, DISFRUTARLO. 

¡Porque es un privilegio servirte! 

No importa donde estés en Presencia, te acompañamos a encontrar tu paz, a tener claridad y enfoque hacia lo que es verdaderamente importante para ti.